Yo
suplico con mi vocecita de alumna
y tú
notas mi necesidad,
pero me
hago la ingenua
cuando tus palabras son: ¡que me necesitas más!
cuando tus palabras son: ¡que me necesitas más!
¡Soy más ruin que tú!
¡No!,
solo es imperativo de la necesidad.
¿Dónde
estoy yo, dónde estás tú?
Quién
se aprovecha del qué,
del cómo, del ser, del no estar…
del cómo, del ser, del no estar…
P.D.: "¿Acaso no tenemos la convicción de que nuestros sentimientos son cíclicos?"
MariCari, la Jardinera fiel.
{¡B U E N A_____S U E R T E!}
sí que son cíclicos, como las funciones senoidales. me ha gustado lo de 'vocecita de alumna'. yo quiero tener muchas alumnas que aprendan matemáticas conmigo y no me rompan el corazón.
ResponderEliminarbesos, mari cari!
una poesía muy adolescente, ¿no crees?
ResponderEliminarYo, lo de vocecita de alumna lo veo muy sensual, aún más si te dejas atrapar en esa falsa ingenuidad.
ResponderEliminarEso del "yo más" es tan mono... No sabes cómo lo echo de menos.
ResponderEliminarBesos
Cuando la convivencia produce roces entre el amor.
ResponderEliminarBesos
Qué lunes romántico y provocativo con tus palabras!
ResponderEliminarCómo me gustaría que algún pobrecito escuchara mi necesidad! Serán todos sordos?
Besos
La de la vocecita soy yo, seguro. ¿Dónde acaba la idea de pareja y dónde la libertad de cada uno? Difícil cuestión...
ResponderEliminarUn beso