De los antiguos niños, valientes,
a las viejas realidades que impacientan nuevos días,
cuando no podías estarte quieto en cualquier cola
y hacíamos mil dibujos de colores en el papel,
cuando los armarios no tenían cerrojos para nosotros
ni para nuestras lágrimas
o para perder los dientes y venía un ratoncito,
con gatos y perros, eran uno más en casa
como el hijo del vecino, casi hermano
recibiendo abrazos y besos, todos.
De los antiguos niños, de aquellos que fuimos
castigados a perder los juegos, ruidosos, curiosos
llenos de energía, quedaron atrás,
estamos en el descanso, en la compostura,
en el buen juicio,
lloramos como niños antiguos todo lo que fuimos una vez.
P.D.: "Game over game!!"
MariCari, la Jardinera fiel.
{¡B U E N A_____S U E R T E!}
la infancia marca mucho, toda la etapa del colegio en general... la universidad marca mucho menos. y lo que viene después, tanto trabajos como cursos varios, no marcan ni la hora. :P
ResponderEliminarbesos, mari cari!
Cuando recuerdo mi niñez me embarga una nostalgia tremenda...
ResponderEliminarBesos.
Uy me hiciste recordar mi niñez. Un beso y te cuidas mi Mari
ResponderEliminarMe encanta, los antiguos niños no se diferencian nada de los nuevos. Como siento que estén abocados a seguir esas huellas de cansancio. Besos.
ResponderEliminarCierto, a veces hay que llorar como niños. Nuestra infancia fue desde luego diferente al menos la mía.
ResponderEliminarBss y gracias por tus palabras.