EXORDIO
Buenas Tardes y bellas pues es un placer
estar en este lugar tan artístico gracias a la Diputación de Badajoz, que
amablemente, como ya ha dicho nuestra Presidenta Antonia Cerrato, acoge a la
Asociación MIGAS para realizar este singular Recital “Por la Paz y la Justicia en Colombia”. En mejores días no podemos
celebrarlo pues justamente, en la pasada semana, se habla muy positivamente del
diálogo de paz entre el Gobierno de Colombia y las FARC (Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombianas) iniciado hace 6 meses en la ciudad de La Habana.
Colombia necesita soluciones pacíficas, donde
se imponga el diálogo al conflicto que dura más de 50 años, y la palabra acalle
a las armas, las palabras, la Literatura.
La literatura colombiana llevó los mismos
pasos que la española, así pasó de ser épica
y mística a tener tildes del romanticismo y de ahí a popularizar el
género costumbrista, hasta que llegó
la modernidad a la Poesía colombiana
con siete cuadernos de poesía bajo el nombre de Piedra y Cielo del poeta Jorge
Rojas, produciéndose un hecho sorprendente, pues ya sería imparable la
fuerza de la poesía que luchará contra la violencia en esa época a través del
movimiento nadaísmo influenciado por
el nihilismo, y del existencialismo,
provocando una verdadera revolución de las letras que ponen fin a 100 años de
soledad, como escribiera García Márquez.
Y la Paz y la
Justicia en Colombia es la pretensión de este recital, y ahora, para todos ustedes, mi
poema dramático titulado:
“Piedra y Cielo colombianos”.
Y no
hay mal que cien años dure,
ni cien
años de soledad que se aguanten
así que
buscó sentirse libre
en el
interior de su cerebro,
notaba
su respiración libre
tan
adentro de su pecho
que lo
abrió de par en par junto a la ventana
aspirando
el aire libre de la tarde
quedando
sus efluvios para siempre en su nariz
mientras
resonaba una cumbia en la gramola,
atrapándola
en el interior de sus oídos,
y miró
al cielo y pensó en Colombia.
Y
contempló el trazado libre del camino
permaneciendo
ya siempre en su retina.
¿Acaso
la piedra del camino es libre?
Sí,
pero solo es una piedra, sin pretensión alguna.
Entre
la piedra y el cielo, nada, nadaísmo.
La
justicia del cielo, es la justicia divina.
La
justicia de la piedra, es la justicia del hombre.
La paz
del cielo, es la paz celestial.
La paz
de la piedra, es la paz que le falta a la Tierra.
Entre
la piedra y el cielo, está Colombia.
MariCari, la Jardinera fiel.
{¡B U E N A_____S U E R T E!}
Excelente iniciativa y tu participación, más que excelente.
ResponderEliminar"Que la palabra acalle a las balas"
ResponderEliminar¿Podrá? Bellos recuerdos me traen tus palabras y dedicatoria a uno de los países que llevo dentro. Estudié tres años en Colombia y fue una de las etapas más bellas de mi vida.
Ojala se cumpla cada una de tus tildes.
Bss
todos los pueblos del mundo tienen un potencial que a veces no se desarrolla por círculos viciosos de los que no es fácil salir. muy bonito poema, al igual que el último que has puesto en fb.
ResponderEliminarbesos, mari cari.
Paz en Colombia y el mundo. Te mando un beso y te me cuidas.
ResponderEliminarCitando a los maravillosos Calle 13:
ResponderEliminar"Hay poca educación, hay muchos cartuchos
Cuando se lee poco, se dispara mucho"